El Puente románico en Navaluenga es un símbolo de la localidad cruzando el fantástico Río Alberche

El Puente románico en Navaluenga, es un maravilloso puente construido en el siglo XVI con sillares de granito unidos con argamasa y reforzado con tajamares triangulares para soportar el cauce del río y componen ensanches locales, para que las personas o los animales puedan cruzar el río sin ningún tipo de problema, al pasar de un lado a otro de la localidad de Navaluenga en la provincia de Ávila.

En el siglo XVI, se llegó a una especie de acuerdo para construir el puente románico de Navaluenga y solventar la barrera natural que ofrecía el río y de esta forma se construyó este bonito puente local que hoy en día es un símbolo para la localidad cruzando el Río Alberche, donde se realizan muchas fotografías y paseos por el mismo tanto por la gente local como por los turistas que vienen los fines de semana y en el período veraniego contemplando su fantástico granito extraído de la poderosa Sierra de Gredos en la provincia de Ávila.

Una de las experiencias únicas de este puente románico en Navaluenga, es su contemplación en las diferentes partes del año, ya que en invierno suele estar cubierto de nieve, en otoño tiene estupendos colores ocres y amarillentos acrecentado con la chopera que está en sus alrededores y en primavera y en verano muestra su verdor y las voces de niños y personas mayores bañándose placidamente en sus impresionantes piscinas naturales.

Curiosamente, hubo un tiempo en el que tenías que pagar por cruzar el Puente románico en Navaluenga, ya que había que pagar un impuesto con el llamado cobro del portazgo si querías pasar con el ganado y de hecho parece ser que en la zona más elevada hay dos aberturas triangulares, que es donde se sentaba posiblemente este cobrador de impuestos de la localidad. También, hay leyendas locales que te podrán quizá contar los ciudadanos de Navaluenga si pasas por la localidad y vives una experiencia única.